— El Concepto
El objetivo principal al diseñar la Réplica de Altamira fue crear un recorrido que realzara la propia cueva y sus pinturas, priorizando la experiencia sensorial sobre la informativa. Se buscaba una recreación vívida que trasladara a los visitantes al Paleolítico sin engañarlos, generando una atmósfera cautivadora y una experiencia inmersiva.
— El Proceso
Se creó la réplica de la cueva de Altamira a partir de planos tridimensionales del Instituto Geográfico Nacional. Utilizando poliestireno expandido, se formaron los volúmenes originales y se añadió una capa de registro con textura real. Los moldes de silicona permitieron crear la «piel» escenográfica, replicando la cueva con mezclas de polvo de roca caliza para color y textura. El resultado: un puzzle de fibra de vidrio montado sobre estructura de refuerzo, instalado en Altamira con cables.
— La experiencia
La experiencia del visitante en la Neocueva de Altamira es una inmersión fascinante en el arte rupestre paleolítico. Mediante tecnología innovadora, se recrea la atmósfera de la cueva original, permitiendo una conexión única con las pinturas prehistóricas, ¡una aventura que transporta al pasado!